Después del viaje a Fontaine quedó muy claro que los codos no estaban bien, así que decidí ir al fisio para recuperarlos. Ha sido una temporada muy parada, apenas he salido a roca y los entrenamientos en rocódromo han sido bastante lamentables, por lo menos ahora si que he recuperado los codos, o eso parece.
Para probarlos me dí una escapadilla el martes a Rozas, iba en plan suave a pasar el día (me lleve hasta un libro para leer entre bloque y bloque :P). A pesar de las nevadas de las semanas anteriores estaba todo seco, así que era un día perfecto para disfrutar. Calentamiento, un par de bloques 5+ de adherencia para calentar, otro 5+ de cantos grandes para seguir....parecía que los codos respondían bien. Finalmente me metí en un par de 6a y algún 6a+ y los codos seguían respondiendo bien, iba suave suave, sin forzarlos demasiado.
Marché 3 horas después, con los codos en perfecto estado, algún que otro rasponazo, los dedos machacados y ¿motivado a tope! Tenia ganas de volver, de ir al roco...de cualquier cosa.
A la noche me llamo el Sambon con mejores noticias aún: ¡En septiembre volvemos a Fontaine! SIIIIIII!!!!
Me ha propuesto empezar un mesociclo los dos a la vez y así llegar fuertes a Fontaine, a ver que tal se da, la tabla que me ha pasado me parece brutal pero como suelo decir: no pain no glory, así que a sufrir se ha dicho para que al llegar a Fontaine sea un paseo de jubiletas :P
